Este año las vacaciones pueden ser diferentes. Igual ya llevabas tiempo planteándote un cambio y dejar la rutina playa – esterilla para otros. Una casa rural con granja os espera y puede ser que, por fin, esta vez, os decidáis a hacer algo distinto, darle la vuelta al mapa y poner rumbo hacia el interior, en vez de seguir la ruta automática a la costa.
En el campo os esperan muchas sorpresas para toda la familia.
¿Por qué elegir una casa rural para las vacaciones en familia?
Elegir una casa rural para las vacaciones en familia es toda una declaración de principios. Con esta decisión, revelas tus ganas de acercarte a la naturaleza y acompañar a tus hijos en ese camino, convirtiéndote en su mejor guía.
También apuestas por el pequeño empresario. Al contratar tus vacaciones en un lugar como una casa rural, contribuyes a mejorar la economía familiar del propietario y su entorno, un propósito que queda muy lejano cuando los días libres en familia transcurren en grandes complejos turísticos o establecimientos hoteleros de mayor tamaño. Con este gesto estás apoyando a las áreas rurales, normalmente más desfavorecidas en lo que a turismo se refiere, sobre todo, cuando se trata de zonas de interior, alejadas de las playas.
Además, en muchos casos, el compromiso de estos pequeños empresarios con su entorno es mucho mayor que el de otro tipo de establecimientos vacacionales y puede que, si investigas, encuentres que están apoyando a productores locales, artesanos de la zona o a las especies autóctonas.
¿Qué ventajas tiene una casa rural con granja?
Una casa rural con granja te da la posibilidad de vivir experiencias diferentes con quienes más quieres. Acudir en familia a uno de estos lugares es fuente de beneficios, como:
- Desayunos, almuerzos, comidas y /o cenas con productos de calidad, procedentes del propio huerto.
- Aislamiento y desconexión totales (si se quiere), para lograr que las vacaciones sean de relax total.
- Oportunidad de acercarse a los animales, incluso darles de comer y jugar con ellos. Es lo que más les gustará a los peques de la casa, y el recuerdo que con más cariño conservarán de las vacaciones.
- Respirar aire puro, a todas horas.
Pero, lo mejor de elegir una casa rural con granja para tu escapada en familia es estar en pleno campo. Y esto significa muchas cosas, y todas buenas:
- Rutas de senderismo, nada más salir por la puerta.
- Cercanía a muchos pueblos donde ir a pasar el día, visitar sus monumentos y probar los productos típicos (e incluso disfrutar de sus fiestas, según las fechas).
- Poder coger la bici y cruzar todos los terrenos circundantes, dejándose impresionar por los paisajes.
- No encontrarse con un solo coche ni escuchar el ruido de fondo constate en la mayoría de ciudades.
- Dormir por la noche como nunca oyendo el canto de los últimos pájaros antes de cerrar los ojos.
- Contemplar los mejores amaneceres y atardeceres entre árboles.
- Comerse un lechazo preparado en horno de barro con leña de encina y disfrutar de una sobremesa digna de reyes.
- Dejar a los niños correr y jugar sin parar, con la tranquilidad de que están en un entorno seguro; y darles la sorpresa de que pueden dar un paseo en pony.
Hacer la maleta para ir será fácil, lo complicado será marcharse el último día después de pasar las vacaciones de vuestra vida en una casa rural con granja… como la de El Enebral. Os esperamos con los brazos abiertos para demostraros que en el campo se vive mejor.